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¿Por qué cambiar el color del cabello?
El cabello es una de las características más visibles de nuestra apariencia y, en muchos casos, puede reflejar nuestro estado de ánimo o estilo. Cambiar el color del cabello de un tono rojo a rubio o platino es una decisión audaz y emocionante. Sin embargo, este proceso no es tan sencillo como aplicar un tintura. A continuación, exploraremos los pasos necesarios, así como las consideraciones a tener en cuenta antes de proceder con este cambio.
¿Qué es la decoloración?
La decoloración es el proceso mediante el cual se elimina el pigmento natural o artificial del cabello. Para transformar un cabello rojo en rubio, es fundamental comprender que necesitarás decolorar el cabello hasta alcanzar el nivel deseado. La decoloración implica el uso de productos químicos, como el peróxido de hidrógeno, que abren la cutícula del cabello para eliminar el color.
Tipos de decoloración
Existen diferentes métodos de decoloración, cada uno con sus ventajas y desventajas:
Decoloración total
Este método implica la aplicación de un decolorante en todo el cabello. Es ideal para quienes desean un cambio radical y uniforme. Sin embargo, requiere un cuidado post-aplicación exhaustivo para mantener la salud del cabello.
Decoloración parcial
Consiste en aplicar el decolorante solo en ciertas secciones del cabello, lo que permite jugar con los contrastes y crear un efecto más natural. Es menos agresiva y suele ser más fácil de manejar.
¿Es adecuado para ti?
Antes de embarcarte en el proceso de decoloración, es vital evaluar el estado actual de tu cabello. Si tu cabello ha sido sometido a tratamientos químicos recientes, es posible que necesites esperar un tiempo antes de realizar otro proceso. Un cabello sano es crucial para obtener el resultado deseado y evitar daños significativos.
Preparativos antes de decolorar
Consulta a un profesional
Siempre es recomendable consultar a un especialista antes de realizar cualquier cambio drástico. Un estilista podrá evaluar el estado de tu cabello y recomendarte el mejor enfoque. Además, ellos pueden guiarte en cuanto a los productos más adecuados para tu tipo de cabello.
Prueba de mechón
Realizar una prueba en un pequeño mechón de cabello te permitirá observar cómo reaccionará tu cabello a la decoloración. Esto es especialmente importante si has teñido tu cabello anteriormente. La prueba de mechón puede prevenir sorpresas desagradables y daños excesivos.
El proceso de decoloración
Materiales necesarios
Para decolorar el cabello rojo a rubio o platino, necesitarás varios productos y herramientas:
- Decolorante
- Peróxido de hidrógeno
- Guantes de plástico
- Brochas para aplicar
- Champú y acondicionador específicos para cabello teñido
- Mascarilla hidratante
- Un espejo y un lugar bien iluminado
Pasos para decolorar el cabello
Paso 1: Preparar el cabello
Lava el cabello unos días antes de decolorar, evitando el uso de acondicionador. Esto permitirá que la grasa natural del cuero cabelludo proteja tu piel de la irritación.
Paso 2: Mezcla del decolorante
Sigue las instrucciones del fabricante para mezclar el decolorante y el peróxido de hidrógeno. Por lo general, se mezcla en una proporción específica que suele ser 1:2.
Paso 3: Aplicación del decolorante
Usa guantes para proteger tus manos. Divide el cabello en secciones y aplica el decolorante comenzando por las puntas y avanzando hacia la raíz. Esto se debe a que las puntas suelen ser más oscuras y necesitan más tiempo de exposición para aclararse.
Paso 4: Tiempo de espera
Deja actuar el decolorante según las recomendaciones. Controla el color cada 5-10 minutos, ya que los tiempos pueden variar dependiendo del cabello. Cuando logres el tono deseado, enjuaga con agua tibia.
Paso 5: Neutralizar el tono
Si el cabello ha quedado con un tono anaranjado, puedes usar un matizador o un shampoo morado. Esto ayudará a corregir el color y lograr un rubio más frío y deseado.
Cuidado posterior a la decoloración
Hidratación profunda
El proceso de decoloración puede dañar la estructura del cabello. Por eso, es vital aplicar mascarillas hidratantes y utilizar productos específicos para cabello teñido para mantener la hidratación y el brillo.
Evita el uso excesivo de herramientas térmicas
Después de decolorar el cabello, lo mejor es evitar el uso de secadores, planchas o tenazas hasta que tu cabello se recupere. Opta por peinados naturales que no requieran calor.
Cambios en la rutina de cuidado capilar
El cabello rubio platino necesita cuidados específicos. Los productos morados y azules son fundamentales para evitar que el cabello se torne amarillo.
Visitas al salón
Si has decidido optar por el rubio platino, es aconsejable seguir un régimen de visitas a la peluquería para mantener el color. Un retoque cada 4-6 semanas es ideal para mantener el aspecto fresco y evitar que crezca el color natural.
Alternativas al proceso químico
Tintes temporales
Si el cambio permanente no te convence, los tintes temporales son una opción efectiva. Aunque no son tan duraderos, ofrecen un cambio de look sin el daño potencial de la decoloración.
Extensiones de cabello
Para quienes buscan un cambio temporal y menos agresivo, las extensiones de cabello pueden ser una opción. Estas ofrecen un nuevo estilo y color sin comprometer tu cabello natural.
Evitar errores comunes
No apresurarse en el proceso
La decoloración es una ciencia y un arte. No apresures ningún paso. Tómate tu tiempo para evitar daños innecesarios.
Escoger el producto incorrecto
No todos los decolorantes son iguales. Investiga y elige un producto de buena reputación recomendado por profesionales.
Ignorar el estado de tu cabello
Realiza un chequeo exhaustivo del estado actual de tu cabello. Un cabello débil o dañado necesita cuidados previos para soportar el proceso de decoloración.
Teñir tu cabello de rojo a rubio o platino es un viaje emocionante que puede transformar tu look y tu confianza. Sin embargo, es un proceso que conlleva responsabilidad y cuidado. Consulta con un profesional, realiza pruebas previas y, sobre todo, ¡disfruta del cambio!