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¿Qué es SCOBY?
SCOBY es un acrónimo que significa Symbiotic Culture Of Bacteria and Yeast, en español, Cultivo Simbiótico de Bacterias y Levaduras. Es una masa gelatinosa que se utiliza en el proceso de fermentación de la kombucha, una bebida fermentada a base de té. El SCOBY está compuesto por diversas bacterias y levaduras que trabajan en conjunto para transformar el té azucarado en una deliciosa y burbujeante bebida.
Ingredientes necesarios para hacer SCOBY
Antes de comenzar el proceso, asegúrate de tener a mano los siguientes ingredientes:
Ingredientes principales
- 1 taza de azúcar (preferiblemente azúcar blanca)
- 8 bolsas de té (puede ser negro, verde o una mezcla)
- 2 litros de agua filtrada
- 1 taza de kombucha sin pasteurizar (puedes comprarla o usar un poco de una tanda anterior)
Utensilios necesarios
- 1 cacerola grande
- 1 frasco de vidrio de al menos 2 litros
- 1 paño limpio o filtro de café
- 1 banda elástica
Paso a paso para hacer SCOBY
Preparar el té azucarado
Empezamos calientando 2 litros de agua en una cacerola grande. Cuando el agua esté casi hirviendo, añade las bolsas de té y el azúcar. Remueve bien hasta que el azúcar se disuelva por completo. Una vez disuelto, retira la cacerola del fuego y deja que el té se infusiona durante aproximadamente 15 minutos.
Enfriar el té
Después de que el té haya infusionado, retira las bolsas de té y deja que la mezcla se enfríe a temperatura ambiente. Este paso es crucial, ya que si el té está caliente, puede matar las bacterias y levaduras necesarias para el crecimiento del SCOBY.
Agregar la kombucha
Cuando el té esté a temperatura ambiente, añade la taza de kombucha sin pasteurizar al frasco de vidrio. Esta kombucha aporta las bacterias y levaduras necesarias para iniciar el proceso de fermentación.
Fermentación inicial
Vierte el té azucarado enfriado en el frasco de vidrio que contiene la kombucha. Asegúrate de que el frasco quede limpio y que haya suficiente espacio en la parte superior para permitir que el SCOBY crezca.
Ahora, cubre la abertura del frasco con un paño limpio o un filtro de café y asegúralo con una banda elástica. Esto permitirá que el aire fluya mientras evita que entren insectos o polvo.
El lugar ideal para fermentar
Coloca el frasco en un lugar cálido (idealmente entre 20 y 30 grados Celsius) y oscuro, como un armario o una alacena. La fermentación tomará entre 7 y 30 días, dependiendo de las condiciones ambientales. Durante este período, el SCOBY comenzará a formarse en la parte superior del líquido.
Monitorear el proceso
Revisa el frasco cada pocos días. Podrás notar que una película gelatinosa comienza a formarse en la superficie. Esto es el inicio de tu SCOBY. Si lo deseas, puedes probar la kombucha después de una semana para verificar si ha alcanzado el sabor deseado. Recuerda que debe ser un poco ácida, pero no excesivamente.
Cosecha del SCOBY
Una vez que hayas alcanzado el sabor deseado y el SCOBY sea de un grosor y textura adecuados, ¡es hora de cosecharlo! Con manos limpias, retira el SCOBY del frasco y colócalo en un plato limpio. Puedes reservar un poco del líquido que queda en el frasco para usar en la próxima tanda de kombucha.
Almacenamiento y cuidado del SCOBY
Cómo almacenar el SCOBY
Si no planeas usar tu SCOBY de inmediato, puedes almacenarlo en un frasco con una parte del líquido de kombucha que has cosechado. Asegúrate de cubrir el frasco como lo hiciste al fermentar inicialmente. Esto mantendrá el SCOBY activo y saludable hasta que estés listo para hacer más kombucha.
Cuidados del SCOBY
- Cambiar el líquido: Si has almacenado tu SCOBY por mucho tiempo, es recomendable cambiar el líquido cada dos semanas.
- Observación: Presta atención a cualquier signo de moho, que se verá como manchas de colores (verde, negro o rosa). Si ves moho, debes desechar el SCOBY y comenzar de nuevo.
- Alimentación: Cada vez que uses tu SCOBY para fermentar, asegúrate de tener una buena proporción de azúcar y té para nutrir al SCOBY y mantenerlo saludable.
Usar la temperatura adecuada
La temperatura es clave para el éxito de la fermentación. Evita lugares fríos, ya que esto puede ralentizar o detener el crecimiento del SCOBY. Si tu hogar es frío, considera usar una manta térmica para mantener el calor adecuado.
Paciencia es clave
El proceso de fermentación puede parecer largo, pero ser paciente es fundamental. No apresures el proceso; cada SCOBY tiene su propio ritmo y, al final, obtendrás mejores resultados.
Variedades de té
Puedes experimentar con diferentes tipos de té, como el té verde, negro o incluso tisanas. Sin embargo, evita usar tés que contengan aceites, como el té de earl grey, ya que pueden interferir con el crecimiento del SCOBY.
Contaminación
Sigue prácticas de higiene adecuada al manipular el SCOBY, ya que la contaminación con otros microorganismos puede arruinar tu cultivo. Lava bien tus manos y los utensilios que uses.
Preguntas frecuentes sobre SCOBY
¿Puedo usar SCOBY de otras personas?
¡Sí! Puedes obtener un SCOBY de un amigo o comprar uno en tiendas especializadas. Asegúrate de que sea de una fuente confiable y que esté en buenas condiciones.
¿Qué hacer si el SCOBY no se forma?
Si después de un mes no ves ningún SCOBY, es probable que haya un problema. Asegúrate de que los ingredientes sean frescos y que el ambiente sea el adecuado. También verifica si la kombucha que usaste como iniciador estaba viva y activa.
¿Se puede reutilizar un SCOBY?
Sí, un SCOBY puede usarse múltiples veces. Con cada lote de kombucha, el SCOBY creará un nuevo disco en la parte superior, permitiéndote experimentar y hacer más kombucha.
¿Cómo sé si mi SCOBY está sano?
Un SCOBY saludable es de color marrón claro o beige y tiene una consistencia gelatinosa. Si observas manchas de moho o un olor desagradable, es mejor desecharlo y comenzar de nuevo.
¿Puedo hacer SCOBY en casa sin kombucha comprada?
No se recomienda, ya que el SCOBY necesita un iniciador con bacterias y levaduras activas. Utilizar kombucha sin pasteurizar es indispensable para el éxito inicial.
