La administración de medicación a nuestros fieles compañeros es una parte esencial del cuidado de la salud de los mismos. Un perro enfermo no solo puede sufrir físicamente, sino que también puede mostrar signos de angustia emocional. Por eso, es crucial que los dueños ¡sepan cómo darle la medicina adecuada!
Índice de la Noticia
Tipos de medicamentos para perros
Antes de entrar en materia, es vital conocer los tipos de medicamentos que podemos encontrar:
- Antibióticos: Usados para combatir infecciones bacterianas.
- Antiinflamatorios: Ayudan a reducir la inflamación y el dolor.
- Analgesicos: Proporcionan alivio al dolor.
- Suplementos: Pueden mejorar la salud general, como omega-3 o glucosamina.
- Antiparasitarios: Prevenir o tratar infestaciones de parásitos.
Preparación para la administración de medicamentos
Reúne lo necesario
Antes de dar la medicación, asegúrate de tener todo a mano:
- Medicamento correcto
- Premios o golosinas
- Agujeros de acceso fácil (si son necesarios para la forma líquida)
- Agua (a veces puede ayudar después de administrar la medicina)
Antes de intentar dar la medicina, considera los siguientes consejos:
- Consulta con tu veterinario para asegurarte de que puedes administrarle el medicamento de la manera que planeas.
- Elige un lugar tranquilo para la administración, libre de distracciones.
- Ten en cuenta el estado de ánimo de tu perro; si está asustado o ansioso, dale tiempo para relajarse.
Métodos para administrar medicamentos
Aplicación directa
Este es el método más directo y, aunque a menudo se considera el más difícil, puede ser muy efectivo:
- Sujeta a tu perro: Coloca una mano sobre su mandíbula superior y la otra sobre la mandíbula inferior.
- Introduce la medicina: Coloca la pastilla o el líquido en la parte posterior de la lengua de su perro.
- Cierra la boca: Manténla cerrada por unos segundos y acaricia su garganta para provocar el trago.
- Usa un premio: Premia a tu perro inmediatamente después de que haya tomado la medicina.
Muchos perros son muy astutos y pueden resistirse a tomar la medicina directamente. En este sentido, esconder la medicina en alimentos puede ser un buen truco:
- Queso blando: Un clásico que funciona muy bien para muchos perros. Asegúrate de que el queso sea seguro para ellos.
- Almohadas de golosina: Existen golosinas diseñadas especialmente para esconder medicamentos.
- Comida húmeda: Mezclar el medicamento con su comida habitual puede enmascarar el sabor.
- Pollo o carne magra: Un poco de carne puede facilitar la tarea. Asegúrate de que el pollo esté bien cocido y sin huesos.
Uso de jeringas para líquidos
Si el medicamento es en forma líquida, utilizar una jeringa sin aguja puede ser una buena opción:
- Prepara la jeringa: Llena la jeringa con la dosis correcta del medicamento.
- Posiciona correctamente: Coloca la jeringa en la esquina de la boca del perro, inclinando ligeramente su cabeza.
- Administra lentamente: Presiona el émbolo de la jeringa lentamente y permite que tu perro trague entre dosis.
Crear asociaciones positivas
Crear un ambiente positivo alrededor de la administración de medicamentos es fundamental. Haz que tu mascota asocie la medicina con experiencias agradables. Aquí te dejamos algunas ideas:
- Usa un tono de voz suave y comprensivo.
- Ofrece golosinas antes y después de la medicación.
- Juega con tu perro para distraerlo antes y después de la toma.
Manejo de la resistencia
Puede que tu perro muestre resistencia a tomar la medicina. Aquí algunos consejos para manejarlo:
- Reduce el estrés: No fuerces la situación, dale tiempo y espacio.
- Prueba los trucos: Si un método no funciona, intenta otro. Tal vez esforzarte en esconder la medicina y no seguir un método directo funcione mejor.
- Considera el uso de dispositivos específicos como tablers para dispensar el medicamento con un premio.
Seguimiento después de la medicación
Observar reacciones
Después de administrar el medicamento, es crucial observar cómo reacciona tu perro:
- Chequea cualquier signo de alergia, como erupciones en la piel o hinchazón.
- Monitorea si presenta efectos secundarios, como vómitos o diarrea.
- Consulta con tu veterinario si observas algo inusual.
Refuerza el comportamiento positivo
Sigue reforzando el buen comportamiento de tu perro. Sigue ofreciendo golosinas y refuerzos positivos después de cada toma. Esto no solo hace que acabe asociando la medicación con algo bueno, sino que también refuerza vuestro vínculo emocional.
¿Qué hacer si aún es difícil administrar la medicina?
A veces, a pesar de todos nuestros esfuerzos, algunos perros se resisten de forma significativa a la medicación. Aquí hay algunas consideraciones finales:
- Consulta con el veterinario: Puede tener recomendaciones adicionales o incluso medicación alternativa.
- Evalúa opciones de forma tópica o intravenosa si es adecuado y necesario.
- Revisa la formulación: los medicamentos pueden venir en diferentes formas. Tal vez un líquido es más fácil que una pastilla para tu perro.
Productos útiles en la administración de medicamentos
Dispositivos y herramientas
En ocasiones, los dueños pueden beneficiarse de ciertos dispositivos para aplicar la medicina de forma más eficaz:
- Pastilleros: Pueden ayudar a mantener un seguimiento de su medicación.
- Dispensadores de golosinas: Que ayudan a incrustar la medicina en un premio.
- Jeringas dosificadoras: Especialmente útiles para formulaciones líquidas.
Explora también foros y comunidades donde otros dueños de perros comparten sus experiencias y trucos para dar medicina a sus mascotas. A menudo se pueden encontrar soluciones creativas que realmente funcionan.
recuerda que la paciencia y el amor son clave en este proceso. No tengas miedo de compartir tus preocupaciones con tu veterinario, para que puedan ayudarte con recomendaciones personalizadas.